LAS LUCIÉRNAGAS
Dicen
que las luciérnagas viven enamoradas de las luces,
ellas
adornan las noches frías y sin colores,
crean
luz como por arte de magia,
usan
sus patrones para guiar a sus amores.
Cuando
cae el sol a las seis de la tarde,
y no
hay estrellas en el cielo,
trato
de mirar y mi pecho arde,
buscando
esa luz color oro, a veces verde o azul como consuelo.
Ellas
son como yo, pequeñas y con nombre de mujer,
conservan
intacta la inocencia,
duermen
de día recargándose de atractivo para el anochecer,
de
todos los colores, al azul, lo sigue con vehemencia.
Por
eso siempre vuela al cielo azul,
él
es grande para que ella lo vea,
para
ellos nunca es demasiado tarde,
cuando
ella con colores a su azul polvea.
Liliana
Sulbarán
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